​La tarde del pasado sábado, la tranquilidad en el centro de El Tabo se vio alterada cuando tres individuos se hicieron pasar por inspectores de la Secretaría Regional Ministerial de Salud, llevando a cabo una falsa fiscalización en el local "Dimar", propiedad de la comerciante Evelyn Farías, también presidenta de la Cámara de Comercio de El Tabo.

​Según el relato de Evelyn Farías, los individuos se presentaron alrededor de las 5 o 10 de la tarde, mostrando supuestas credenciales de la Seremi de Salud y solicitando la patente comercial, lo cual generó suspicacias ya que dicha entidad no tiene competencia para requerir ese documento. Los impostores, además, manifestaron su interés en inspeccionar los baños del establecimiento.

​En un acto de astucia, uno de los empleados logró percatarse de irregularidades en la credencial y solicitó una fotografía de la misma. Fue entonces cuando los supuestos inspectores, al percatarse de que su engaño se desmoronaba, alegaron la necesidad de buscar a otra funcionaria.

​Los supuestos inspectores se desplazaban en un minibus blanco con un acrílico que simulaba ser un vehículo municipal.

​La valentía de Evelyn Farías se hizo evidente cuando, tras interceptar el vehículo de los falsos inspectores en Arturo Prats con San Marcos, en pleno centro de El Tabo, impidió su avance y alertó a Seguridad Pública.

​El supuesto vehículo municipal fue inspeccionado, resultando ser propiedad de una persona llamada María José, y no un vehículo estatal como pretendían hacer creer. Los individuos continuaron mostrando la cuestionable credencial, pero la actuación de Seguridad Pública y Carabineros permitió descubrir su impostura.

​La denuncia de Evelyn Farías condujo a la detención de los falsos inspectores, quienes, según informó Carabineros, evidenciaban signos de consumo de alcohol. Se sospecha que su intento de estafa podría haber tenido motivaciones económicas, buscando obtener coimas de comerciantes desprevenidos.

​La presidenta de la Cámara de Comercio destacó la importancia de educar a los comerciantes sobre los procedimientos legítimos de las autoridades y resaltó la necesidad de estar alerta, especialmente en la temporada estival, cuando aumentan las intentonas de estafa.

​Este incidente sirve como una advertencia a los comerciantes de la zona para mantener la vigilancia y no caer en engaños de impostores. Al mismo tiempo la rápida y efectiva respuesta de las autoridades locales refleja la importancia de la colaboración entre la comunidad y las fuerzas de seguridad para mantener la integridad y tranquilidad en la comuna.