16 de octubre de 2025
PUCV DONÓ CERCA DE 600 CUENTOS INFANTILES A RESIDENCIAS DE VALPARAÍSO
En un hermoso gesto de compromiso y sensibilidad social, la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso donó cerca de 600 cuentos infantiles a niños, niñas y adolescentes que viven en residencias del Servicio Nacional de Protección Especializada a la Niñez y Adolescencia de la región.

En un gesto lleno de compromiso y sensibilidad social, la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso (PUCV) donó cerca de 600 cuentos infantiles a niños, niñas y adolescentes que viven en residencias del Servicio Nacional de Protección Especializada a la Niñez y Adolescencia de la región.
La iniciativa, impulsada en conjunto entre la PUCV y el Servicio de Protección, reunió el trabajo de diversas unidades universitarias Dirección de Inclusión, Vinculación con el Medio, Bibliotecas y PUCV Sostenible con el propósito de fomentar la lectura, la imaginación y el desarrollo integral de la infancia.
A esta cruzada solidaria también se sumaron colegios pertenecientes a la Red de Colegios Católicos, entre ellos Champagnat, Salesianos, Seminario San Rafael, Ana María Janer y San Pedro de Nolasco, cuyos estudiantes y comunidades educativas participaron activamente con donaciones.
“Estamos celebrando por segunda vez una tremenda colaboración con la Universidad Católica de Valparaíso, que ha donado muchos libros para niños y niñas de primera infancia. Esta donación es fundamental para su estimulación y desarrollo vital”, destacó Carla Oyarzún, directora regional del Servicio Nacional de Protección Especializada a la Niñez y Adolescencia de Valparaíso.
Por su parte, la vicerrectora de Vinculación con el Medio de la PUCV, Jacqueline Páez Herrera, subrayó el compromiso social de la institución:
“Nuestra universidad busca acompañar los desafíos del Servicio de Protección y sensibilizar a la comunidad sobre las brechas que aún existen. Creemos que las instituciones grandes deben apoyar y aportar para sanar los dolores profundos de nuestro territorio”, finalizó.
Esta campaña demuestra que cuando la academia, las escuelas y las familias se unen, la lectura puede transformar realidades