A un año del derrumbe del relave, la Dirección General de Aguas confirmó la afectación en el río Ligua y la Quebrada Chinchorro, sancionando a la empresa por comprometer la calidad de los recursos hídricos y la seguridad de las comunidades.
Las sanciones suman 31,7 millones de pesos, alcanzando un total de 92 millones por extracciones no autorizadas en el acuífero “Estero Los Molles”, una zona con restricción para nuevas captaciones.