Un total de 488 teléfonos celulares y 1.803 armas blancas fueron incautados en los operativos de registro y allanamiento realizados por Gendarmería en los distintos recintos penitenciarios de la Región de Valparaíso durante el primer trimestre de 2025. Las cifras fueron entregadas este jueves por la seremi de Justicia y Derechos Humanos, Paula Gutiérrez Huenchuleo, y el director regional de Gendarmería, coronel Héctor Inostroza Orellana, quienes detallaron que estos procedimientos forman parte del Plan Nacional de Seguridad Penitenciaria Contra el Crimen Organizado. Entre enero y marzo, se ejecutaron 300 operativos en total, de los cuales 125 fueron registros rutinarios y 175 extraordinarios. “Se han incrementado los registros y allanamientos al interior de los distintos recintos penales de la región. Esto es un fiel reflejo del profesionalismo y esfuerzo que realiza día a día nuestro personal penitenciario”, indicó el coronel Inostroza. Además de los celulares y armas blancas, se requisaron 12.500 gramos de drogas en diferentes formatos, lo que evidencia el constante trabajo para mantener el control de los recintos. Los decomisos se concentraron principalmente en el Complejo Penitenciario de Valparaíso, donde se incautó el 33,6% de las armas blancas, y en el Centro de Detención Preventiva de Quillota, donde se requisó el 40,7% de los celulares. Otros recintos con altas cifras fueron el Centro de Cumplimiento Penitenciario de San Antonio y el Complejo Penitenciario de Valparaíso. La seremi de Justicia, Paula Gutiérrez, enfatizó que estas acciones buscan “disminuir la violencia dentro de las cárceles y mantener el control dentro de cada uno de los recintos penitenciarios”. Los operativos contaron con el apoyo de los Equipos de Canes Adiestrados (ECA), las Unidades de Servicios Especiales Penitenciarios (USEP) y contingente de la Dirección Regional, reafirmando el compromiso institucional en la lucha contra el crimen organizado al interior de las cárceles.
Dos allanamientos a igual número de pabellones del Centro de Detención Preventiva de Quillota culminaron con el decomiso de 30 teléfonos celulares y otros artículos que no están permitidos por la administración penitenciaria. A estos operativos se sumó el desarrollado en la unidad penal de San Antonio y donde se requisaron abundantes armas blancas artesanales. El último procedimiento se efectuó alrededor de las 09:00 horas de este jueves, en el pabellón cinco del recinto quillotano, correspondiente a población condenada. En la oportunidad el personal de dicha unidad logró decomisar once teléfonos móviles, 20 armas blancas de fabricación artesanal, nueve cargadores USB con sus respectivos cables y siete audífonos. Previamente, la mañana del pasado miércoles, el operativo de registro y allanamiento se concentró en el pabellón siete. A las 11:30 personal de guardia interna y puestos especiales ingresó a la dependencia, desalojándola y trasladando a la población penal hasta el patio interior. Posteriormente, se procedió a revisar los dormitorios, donde se encontraron 32 envoltorios de papel cuadriculado con cannabis sativa, 19 celulares, una botella y dos bolsas con licor artesanal, entre otros elementos. Respecto al operativo efectuado este jueves, el jefe de la unidad penal, teniente coronel Luigi Ugalde Bruna, sostuvo que: “Dentro de la planificación interna que se realiza en la unidad para mantener los estándares de seguridad se realizó un procedimiento de registro y allanamiento en el pabellón número cinco, de internos condenados, logrando incautar una cantidad importante de elementos prohibidos por la administración penitenciaria, como son: armas cortopunzantes, equipos celulares y sustancias ilícitas”. El director regional de Gendarmería, coronel Álvaro Millanao Valenzuela, destacó la importancia de estos procedimientos para reforzar la seguridad de los recintos.“Hemos continuado aplicando el plan de registro y allanamientos permanente a todas las unidades penales de la región de Valparaíso. Con esto mantenemos los controles permanentes por sobre la población penal y esto, también, nos permite efectuar un trabajo más seguro, más controlado y con mejores resultados”. De cada uno de los hechos se informó al ministerio público, quien determinó las acciones a seguir con los teléfonos y droga incautada.
Un total de 488 teléfonos celulares y 1.803 armas blancas fueron incautados en los operativos de registro y allanamiento realizados por Gendarmería en los distintos recintos penitenciarios de la Región de Valparaíso durante el primer trimestre de 2025. Las cifras fueron entregadas este jueves por la seremi de Justicia y Derechos Humanos, Paula Gutiérrez Huenchuleo, y el director regional de Gendarmería, coronel Héctor Inostroza Orellana, quienes detallaron que estos procedimientos forman parte del Plan Nacional de Seguridad Penitenciaria Contra el Crimen Organizado. Entre enero y marzo, se ejecutaron 300 operativos en total, de los cuales 125 fueron registros rutinarios y 175 extraordinarios. “Se han incrementado los registros y allanamientos al interior de los distintos recintos penales de la región. Esto es un fiel reflejo del profesionalismo y esfuerzo que realiza día a día nuestro personal penitenciario”, indicó el coronel Inostroza. Además de los celulares y armas blancas, se requisaron 12.500 gramos de drogas en diferentes formatos, lo que evidencia el constante trabajo para mantener el control de los recintos. Los decomisos se concentraron principalmente en el Complejo Penitenciario de Valparaíso, donde se incautó el 33,6% de las armas blancas, y en el Centro de Detención Preventiva de Quillota, donde se requisó el 40,7% de los celulares. Otros recintos con altas cifras fueron el Centro de Cumplimiento Penitenciario de San Antonio y el Complejo Penitenciario de Valparaíso. La seremi de Justicia, Paula Gutiérrez, enfatizó que estas acciones buscan “disminuir la violencia dentro de las cárceles y mantener el control dentro de cada uno de los recintos penitenciarios”. Los operativos contaron con el apoyo de los Equipos de Canes Adiestrados (ECA), las Unidades de Servicios Especiales Penitenciarios (USEP) y contingente de la Dirección Regional, reafirmando el compromiso institucional en la lucha contra el crimen organizado al interior de las cárceles.
Dos allanamientos a igual número de pabellones del Centro de Detención Preventiva de Quillota culminaron con el decomiso de 30 teléfonos celulares y otros artículos que no están permitidos por la administración penitenciaria. A estos operativos se sumó el desarrollado en la unidad penal de San Antonio y donde se requisaron abundantes armas blancas artesanales. El último procedimiento se efectuó alrededor de las 09:00 horas de este jueves, en el pabellón cinco del recinto quillotano, correspondiente a población condenada. En la oportunidad el personal de dicha unidad logró decomisar once teléfonos móviles, 20 armas blancas de fabricación artesanal, nueve cargadores USB con sus respectivos cables y siete audífonos. Previamente, la mañana del pasado miércoles, el operativo de registro y allanamiento se concentró en el pabellón siete. A las 11:30 personal de guardia interna y puestos especiales ingresó a la dependencia, desalojándola y trasladando a la población penal hasta el patio interior. Posteriormente, se procedió a revisar los dormitorios, donde se encontraron 32 envoltorios de papel cuadriculado con cannabis sativa, 19 celulares, una botella y dos bolsas con licor artesanal, entre otros elementos. Respecto al operativo efectuado este jueves, el jefe de la unidad penal, teniente coronel Luigi Ugalde Bruna, sostuvo que: “Dentro de la planificación interna que se realiza en la unidad para mantener los estándares de seguridad se realizó un procedimiento de registro y allanamiento en el pabellón número cinco, de internos condenados, logrando incautar una cantidad importante de elementos prohibidos por la administración penitenciaria, como son: armas cortopunzantes, equipos celulares y sustancias ilícitas”. El director regional de Gendarmería, coronel Álvaro Millanao Valenzuela, destacó la importancia de estos procedimientos para reforzar la seguridad de los recintos.“Hemos continuado aplicando el plan de registro y allanamientos permanente a todas las unidades penales de la región de Valparaíso. Con esto mantenemos los controles permanentes por sobre la población penal y esto, también, nos permite efectuar un trabajo más seguro, más controlado y con mejores resultados”. De cada uno de los hechos se informó al ministerio público, quien determinó las acciones a seguir con los teléfonos y droga incautada.